A la espera de ver cómo evolucionará el sector de las bebidas durante las fases que componen la desescalada, lo cierto es que ninguna industria ha pasado indemne por la cuarentena derivada del estado de alarma. ¿Hasta qué punto ha afectado la crisis del coronavirus a una industria cuyo producto final es inherente al bienestar social?
Aumento considerable del consumo de bebidas en los hogares
Una de las grandes noticias para el sector de las bebidas, ligada a unos hábitos de consumo propios de pandemias similares a la del COVID-19, es el aprovisionamiento masivo de productos de primerísima necesidad.
En concreto, el consumo de bebidas -y alimentos- ha aumentado casi un 30% respecto al año pasado, según los datos ofrecidos por el Gobierno de España en una comparecencia especial, dirigida al sector agroalimentario. Agua embotellada, cerveza y vino son las categorías preferidas por los españoles para pasar la cuarentena, seguido por los refrescos y las bebidas energéticas.
Esta fiebre por el abastecimiento a futuro está educando al consumidor, cada vez más preocupado por la salud, la sostenibilidad y el ahorro, por lo que las marcas deberán adaptar sus productos a las posibles nuevas tendencias heredadas de esta crisis.
El cierre de la hostelería, el gran reto a batir
Pese a las positivas noticias relacionadas con el consumo particular, una parte del sector de las bebidas teme no poder remontar el cierre de la hostelería en España. Esto se debe a que las ventas provenientes del canal de la alimentación no compensan las pérdidas en el canal hostelero. En ese sentido, el sector más afectado es el de las espirituosas, con un 70% de pérdida de ventas totales. Algo, dicen, irrecuperable a estas alturas.
El sector de las bebidas y la alimentación busca medidas que garanticen su actividad de forma continuada
Además de ser el principal sector económico del país, la industria de alimentos y bebidas es clave para la lucha contra la pandemia y de su continuidad depende el abastecimiento en el corto y medio plazo de tiendas y supermercados, como señala el siguiente artículo de la Federación Española De Industrias de Alimentación y Bebidas.
Por esta razón, y para proteger al más de medio millón de trabajadores que operan en las 300.000 empresas del sector, las principales instituciones de la industria alimentaria han desarrollado un Protocolo Guía sobre protección y prevención laboral, que recogerá las diferentes medidas de gestión, limpieza y desinfección, necesarias para una actividad responsable y sin riesgos.
¿Qué le deparará el futuro al sector de las bebidas?
La compra y distribución a través de Internet es otro de los grandes favorecidos de la crisis del coronavirus. De hecho, el comercio electrónico ha alcanzado este mes de abril máximos históricos en todas sus categorías y muchas empresas están viendo en el canal online una nueva vía de distribución. El acuerdo entre Central Lechera Asturiana y Deliveroo es un gran ejemplo de ello. En Eneryeti Company también pensamos el e-commerce es un camino que recorreremos más pronto que tarde, por eso ofrecemos envíos a cualquier lugar de la Península.
Si algo hemos aprendido de esta pandemia es que, por muy certeras que parezcan las proyecciones de futuro, no puede darse nada por sentado. Con la hostelería cerrada parcialmente y, sin embargo, el consumo particular de bebidas aumentando cada semana, queda patente el interés del gran público por el producto de este sector. ¿Habrá que buscar nuevas formas de distribución? ¿Habilitar zonas de consumo sin riesgo de infección? ¿Adaptarse a un nuevo modelo de consumo? Solo una cosa está clara: todavía hay futuro por delante para el sector.
